Desde la promulgación de la Constitución de 1991, Colombia ha otorgado un valor primordial a la participación ciudadana, considerándola un pilar constitucional y un principio fundamental. Esta transformación del sistema político ha llevado a la construcción de un modelo de Estado en el que la ciudadanía, las regiones y las minorías desempeñan un papel vital en la toma de decisiones colectivas. En este contexto, el artículo analiza la evolución de la participación ciudadana en Colombia, enfocándose en las modificaciones normativas que han impulsado su reconocimiento como derecho. Se abordan aspectos como la definición conceptual de la participación ciudadana, los avances y desafíos que surgieron con la Constitución de 1991, y los obstáculos y oportunidades presentes en la Ley de Participación Democrática (Ley 1757 de 2015). Este análisis destaca que, al menos desde una perspectiva normativa, la participación ciudadana se ha consolidado como un derecho esencial para el funcionamiento efectivo del sistema democrático en Colombia.